Los errores humanos son inevitables, pero su impacto en la seguridad laboral puede minimizarse con las herramientas adecuadas. Un estudio sobre el desempeño humano en seguridad demuestra que el 80% de los incidentes en el trabajo están relacionados con fallos humanos, muchas veces provocados por debilidades organizativas y condiciones laborales inadecuadas. Entonces, ¿cómo pueden los responsables de seguridad y salud prevenir estos errores y reducir los incidentes?
El desafío de los errores humanos en seguridad
La mayoría de los accidentes no ocurren por un solo error, sino por una acumulación de factores que incluyen fallas en la organización, procedimientos poco claros, presión laboral y falta de entrenamiento. En este contexto, las herramientas de desempeño humano ofrecen un enfoque práctico para mejorar la seguridad y reducir la probabilidad de errores críticos.
Los responsables de seguridad y salud deben comprender que los errores no son solo responsabilidad del trabajador, sino que están influenciados por múltiples factores, como la carga de trabajo, la presión de producción, la falta de recursos y la fatiga. La gestión de estos factores es clave para una prevención efectiva.
Herramientas clave para la mejora del desempeño humano en seguridad
- Autoevaluación y chequeo personal (S-T-A-R)
- Stop (Detenerse): Antes de ejecutar una tarea, hacer una pausa para reflexionar.
- Think (Pensar): Evaluar la acción a tomar y sus posibles consecuencias.
- Act (Actuar): Ejecutar la tarea con atención plena.
- Review (Revisar): Comprobar que el resultado es el esperado.
Esta herramienta ayuda a los trabajadores a evitar errores por descuido y a mantenerse alerta en tareas repetitivas. Su implementación en la rutina diaria puede reducir significativamente incidentes menores que, acumulados, podrían derivar en eventos graves. - Revisión de la zona de trabajo antes de empezar
- Un minuto antes de comenzar una tarea puede marcar la diferencia. Un recorrido rápido del entorno permite identificar peligros inesperados, verificar condiciones de seguridad y ajustar medidas preventivas.
- Pausar cuando hay dudas y pedir ayuda
- Fomentar una cultura en la que los trabajadores se sientan seguros para detenerse y preguntar cuando no están seguros de cómo proceder.
- Actitud de cuestionamiento
- Enseñar a los empleados a no asumir que “todo está bien” y a cuestionar información, procedimientos o condiciones que no parecen correctas.
- Identificación de pasos críticos
- Determinar qué acciones dentro de una tarea pueden generar consecuencias graves si se realizan incorrectamente y tratarlas con precaución adicional.
- Verificación y comunicación en tres pasos
- Un método simple pero efectivo: el emisor del mensaje lo comunica, el receptor lo repite y el emisor confirma que se entendió correctamente.
Implementación efectiva de estas herramientas
Para que estas herramientas sean efectivas, es fundamental que las empresas:
- Capaciten continuamente a sus empleados: No basta con una sola formación, se deben realizar sesiones periódicas con ejemplos prácticos y casos reales.
- Promuevan una cultura de seguridad: Crear un entorno en el que los trabajadores se sientan cómodos aplicando estas estrategias sin temor a represalias.
- Aseguren el compromiso del liderazgo: Los supervisores deben dar el ejemplo y reforzar la aplicación de estas herramientas en el día a día.
- Utilicen tecnología para apoyar la gestión de seguridad: Aplicaciones móviles, sensores y sistemas de alerta pueden ayudar a detectar y corregir errores en tiempo real.
Casos de éxito
Algunas organizaciones han implementado con éxito estas herramientas y han reducido significativamente sus tasas de incidentes. Un ejemplo es una planta de manufactura que adoptó la autoevaluación S-T-A-R en sus procesos críticos, logrando una disminución del 40% en errores humanos en un año. Otro caso es el de una empresa de energía que implementó revisiones de zona antes de cada turno, reduciendo los incidentes de seguridad en un 35%.
Conclusión
La seguridad laboral no depende solo de cumplir normativas, sino de cómo se aplican las herramientas que permiten reducir el impacto del error humano. Al implementar estrategias como la autoevaluación, la pausa ante la duda y la comunicación efectiva, los responsables de seguridad pueden fortalecer la prevención de accidentes y mejorar la cultura de seguridad en sus organizaciones.
Adoptar un enfoque proactivo basado en estas herramientas puede marcar la diferencia entre un entorno laboral seguro y uno propenso a incidentes. ¿Estás listo para integrarlas en tu estrategia de seguridad?