En el contexto de la seguridad laboral, el compromiso de los empleados se ha convertido en un factor clave para garantizar un entorno de trabajo seguro y saludable. Los datos lo respaldan: según un estudio de Gallup, las organizaciones con mayor compromiso de sus empleados experimentan hasta un 70% menos de incidentes laborales que aquellas con menor compromiso. Pero ¿cómo podemos mejorar este compromiso en nuestras organizaciones?
Dar voz a los trabajadores
Uno de los primeros pasos para aumentar el compromiso es ofrecer a los trabajadores la oportunidad de ser escuchados. Los empleados de primera línea son quienes mejor conocen los riesgos presentes en sus entornos de trabajo. Sin embargo, muchas organizaciones aún no buscan activamente sus ideas y opiniones. Ignorar su experiencia no solo es un error, sino que puede llevar a problemas más graves. Al fomentar un entorno en el que los empleados puedan expresar sus inquietudes y sugerencias, las organizaciones no solo reducen el riesgo de accidentes, sino que también promueven un sentido de pertenencia y responsabilidad compartida en la seguridad.
Confiar en los empleados
La confianza es un elemento fundamental para que los empleados se sientan empoderados a la hora de tomar decisiones relacionadas con la seguridad. Para lograr una cultura de seguridad sólida, es necesario que los empleados de todos los niveles tengan la autonomía para abordar los riesgos en su entorno de trabajo. Esto no solo mitiga los riesgos de forma inmediata, sino que también genera confianza entre la dirección y los trabajadores, lo que refuerza el compromiso con la seguridad.
Actuar sobre la retroalimentación
Recoger las preocupaciones y sugerencias de los trabajadores no es suficiente: es vital que las organizaciones tomen medidas en función de esta retroalimentación o feedback. Ignorar las preocupaciones puede erosionar rápidamente la confianza en el sistema de seguridad, haciendo que los empleados dejen de reportar riesgos. Es esencial que los líderes de la empresa demuestren de manera visible que se están tomando acciones para abordar los problemas identificados.
Involucrar a los trabajadores en la toma de decisiones
Otra estrategia para aumentar el compromiso es incluir a los empleados en las decisiones clave relacionadas con la seguridad. Cuando los trabajadores se sienten parte del proceso, es menos probable que se opongan a los cambios o nuevas implementaciones. Las herramientas digitales, como las aplicaciones móviles de EHS (Environmental Health and Safety), pueden facilitar este proceso al permitir que los empleados participen en la identificación de riesgos y la toma de decisiones, garantizando que los cambios se adapten mejor a las realidades del lugar de trabajo.
Crear un entorno psicológicamente seguro
Por último, para fomentar un verdadero compromiso con la seguridad, es necesario crear un entorno en el que los empleados se sientan seguros para hablar sobre errores o problemas sin temor a represalias. Cuando las organizaciones promueven una cultura de aprendizaje basada en el análisis de los errores, se crea un espacio donde la seguridad puede florecer.
En resumen, mejorar el compromiso de los empleados con la seguridad requiere un enfoque integral que combine la escucha activa, la confianza, la acción y la inclusión. Estos pequeños cambios pueden tener un impacto significativo en la cultura de seguridad de una organización, llevando a mejores resultados y a un entorno laboral más seguro.
