Hace unos días, asistí al evento que la empresa de autobuses Tusgsal, organiza para sus trabajadores y familias. Me quedé gratamente sorprendida con las distintas actividades que habían preparado para ese día tan especial. Pero quizás deba remontarme un poco más atrás para contar la razón de mi grata sorpresa.
Hace unos años, cuando estaban pensando en certificar su sistema de gestión de seguridad vial bajo la ISO 39001, les impartí yo esa formación. Ese día, ya me hice una idea de las características de esta empresa de economía social, en la que parte de sus 800 trabajadores son accionistas. No era un buen momento para ellos, pues estaba en juego la continuidad del negocio por la licitación del servicio de autobuses que había salido a concurso y tenían miedo de perderla. Allí vi que más que una empresa, son una gran familia, y la semana pasada lo puede comprobar “in situ”.
Echando un vistazo a su web, observe que no sólo se habían certificado en ISO 39001, sino también en el Modelo de Empresa Saludable de AENOR. Además tienen otras cuatro certificaciones ISO, con lo que demuestran que, “querer es poder”, es decir, los sistemas de gestión se adaptan perfectamente a cualquier tipo de empresa, no importa el sector ni el tamaño; frase que suelo decir mucho en mis cursos y algunos me miran escépticos.
Pero volviendo al tema inicial, el pasado sábado 4 de junio estuve viendo cada actividad que tenían preparada para las familias de los empleados y las temáticas eran: diversión, salud y bienestar y seguridad vial. ¡Y todas integradas! ¡No está nada mal!
En el campo de la diversión se incluían todas las actividades propuestas: desde teatro en un autobús a toboganes de agua, pasando por el deporte con clases de tenis y skate, los masajes para evitar problemas musculo esqueléticos, un taller donde se explicaba la elaboración de zumos y platos con fruta y la seguridad vial a través de nuestro simulador de conducción que hizo las delicias de los más pequeños y unas gafas que simulaban la realización de actividades bajo los efectos del alcohol que sorprendió a todos. Y todo esto, bajo la constante preocupación de la empresa por la seguridad y salud de los participantes a través de la instalación de dispensadores de crema solar y agua a todas horas.
En cada curso que imparto sobre seguridad vial o empresa saludable, la pregunta del millón es: ¿qué podemos poner como acciones de mejora en mi empresa?. Y yo siempre respondo lo mismo: usa el sentido común: qué eres, a qué te dedicas, quiénes son tus partes interesadas y cuáles son sus intereses y expectativas. Teniendo en cuenta todo esto y los requisitos del sistema de gestión, lo que puedes hacer, te sale solo.
Así, Tusgsal monta una jornada para sus familias y les enseña hábitos de vida saludables y seguros, transmitiendo su preocupación por los accidentes laborales, la promoción de la salud, la importancia de buena dieta, hacer deporte y no consumir alcohol.
Pero va más allá, como pide el modelo de la OMS (Organización Mundial de la Salud) y de AENOR (Asociación Española de Normalización y Certificación) y participa en la comunidad a través de jornadas de trabajo, como la celebrada el pasado 31 de mayo en el BCIN (Badalona Centro Internacional de Negocios) titulada “Hacia una empresa saludable: nutrición y salud en el ámbito personal y profesional“, donde el Responsable del Departamento de Seguridad y Salud de TUSGSAL, Carlos Salas, ofreció una ponencia en la que trató el modelo de éxito de la empresa TUSGSAL y en su recorrido hacia el reconocimiento de Empresa Saludable bajo los estándares de la certificación que otorga AENOR.
Para mí, como consultora y auditora, este es un claro caso de éxito porque, no se tienen que inventar acciones ni realizar eventos “sin ton ni son”, sino sabiendo perfectamente cuáles son los objetivos en relación con su contexto, sus partes interesadas y los riesgos y oportunidades de sus sistemas de gestión.
