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Tras más de 167 años de historia, Mantequerías Arias sigue siendo una de las empresas líderes de España en la fabricación y comercialización de alimentos lácteos, y es actualmente la compañía número uno del mercado de queso fresco, gracias a su constante apuesta por la innovación, la calidad y las personas. La firma produce marcas tan conocidas y queridas como Burgo de Arias, la propia Mantequilla Arias, Caprice des Dieux, San Millán, Chamois d’Or, la Cabaña, etc
Arias forma parte del Grupo SAVENCIA Saveurs & Spécialités, grupo multinacional francés que cuenta con unos 22.000 colaboradores a nivel mundial, siendo uno de los principales transformadores mundiales de leche.
En España, la compañía ocupa a 450 empleados repartidos en seis centros de trabajo: Madrid, Vegalencia (Asturias), Burgos, Valladolid, Albacete y Ronda.
A nivel preventivo, la firma ha apostado por crear una fuerte cultura preventiva, que va cimentando desde hace unos cuantos años a partir de distintas iniciativas como la que se expone a continuación.
Las visitas de seguridad comportamentales (VSC) se vienen aplicando desde el año 2010 en la compañía como parte importante del proceso de integración de la prevención en el día a día, y realmente es una iniciativa marcó un cambio en la cultura preventiva de la organización.
¿Cómo surgió la iniciativa?
La evolución natural de la cultura de seguridad de la compañía llevó a tener que llegar más allá de lo que se venía haciendo, es decir, que se seguía trabajando en la mejora de las condiciones de trabajo así como en las instalaciones y equipos, pero en paralelo empezaron a observar y modificar sus comportamientos. Por ejemplo: “Hay un bache en el suelo que puedo pisar y hay que reparar, pero mientras lo reparan, ¿Qué puedo hacer para no tener un incidente?”.
Para conseguir este cambio cultural en el que el objetivo era conseguir la implicación y participación de toda plantilla, se inició el proyecto de visitas de seguridad comportamentales.
¿En qué consiste?
La idea es que el 100% de la plantilla lleve a cabo visitas de seguridad a sus compañeros de trabajo.
Para ello, se formó inicialmente tanto al comité de dirección como a los distintos mandos de la empresa, y cada año se ha ido ampliando este colectivo.
Para el desarrollo de una visita se citan a 2 personas, que observarán a una tercera como desempeña su trabajo. De forma previa, se decide qué tarea y a quien realizar la visita. Después, se realiza la observación de la tarea de forma global y centrándose en todos los gestos, acciones, espacio de trabajo, instrucciones, herramientas, Epis, etc . Una vez finalizada la observación se dialoga con la persona a la que se ha hecho la visita de seguridad comentando, en primer lugar, aquellos puntos positivos en relación con la seguridad y salud sobre las acciones realizadas, y después aquellas acciones o condiciones peligrosas que en un determinado momento podrían llegar a materializarse en un incidente o accidente de trabajo, y que se deben corregir mediante cambios comportamentales principalmente, aunque también se puedan dar otras circunstancias como una falta de instrucciones o de equipos adecuados.
Se trata de llegar siempre a una solución consensuada y permanente en el tiempo con la persona observada. Por lo que se llega a un acuerdo entre las personas que realizan la visita y la persona observada sobre qué acciones inmediatas se van a poner en marcha y también, si es necesario, otras que se deban añadir a la planificación preventiva con su responsable y plazo de ejecución.
El objetivo es alcanzar al menos un 80% de acciones inmediatas que, a través de un cambio comportamental, supongan una reducción o eliminación del riesgo detectado. El 20% restante se apoya con acciones planificadas que requieren algún tipo de inversión, compra, modificación o estudio.
Con esto, se trata de transmitir que con acciones muy simples e inmediatas, podemos mejorar nuestro puesto de trabajo y las condiciones de seguridad del mismo, lo cual no quiere decir que no se deban dotar de determinados recursos o adquirir una serie de equipos, sino que mientras se busca una solución a un problema se trata de reducir las acciones que puedan ser peligrosas. Cabe resaltar que la mayoría de las observaciones van dirigidas a actitudes, gestos o posturas que con un pequeño cambio pasarían a erradicarse o convertirse en no peligrosas.
Al final de la conversación se realizan una serie de preguntas relativas a procedimientos, accidentes ocurridos, objetivos, estado de los equipos de protección, etc. Todo esto busca el que se hable de prevención y que las personas puedan participar en la mejora de las condiciones de su puesto de trabajo.
Resultados
Este proceso ha ido evolucionando con los años y no solo cada vez participan más personas de la compañía, sino que cada vez está más valorado por las personas que trabajan en la empresa y como muestra de ello están los resultados a nivel de siniestralidad que se están consiguiendo, ya que se ha reducido en 9 años un 95% los accidentes con baja y un 87% los accidentes totales.
Fuente: Prevencionar, Revista Seguridad Laboral y PrevenControl.