En un momento en el cual se ha recordado la importancia de la cooperación, quizás también conviene recordar la importancia del voluntariado en la empresa y poner al día nuestros compromisos con el medio ambiente y la sociedad.
El Voluntariado Corporativo
Según el Observatorio de Voluntariado Corporativo es un conjunto de actividades promovidas y apoyadas por una empresa que tiene como finalidad involucrar a sus empleados a través de la participación voluntaria en proyectos y causas sociales.
Poniendo en su descripción especial hincapié en el carácter voluntario de los participantes, que ceden su tiempo, capacidades y talento, además añaden un triple significado a la estrategia de voluntariado corporativo:
- La buena política de voluntariado, que está alineada con la cultura de la empresa, es aquella que beneficia al colectivo al cual se destina la acción social.
- Aquella que aporta algo relevante para los empleados implicados.
- Y aquella que reporta beneficios a la empresa que la desarrolla.
Cuando se habla de beneficios para la empresa, nos referimos a:
En primer lugar, la aportación que la empresa realiza en pro de las personas o el medio ambiente, contribuyendo de esta forma a un cambio hacia un panorama mejor, más justo y sostenible.
Esto hace que la percepción que tienen las personas sobre tu empresa sea más positiva, las buenas acciones funcionan como redes de inspiración, que además de hacer que tu empresa sea más valorada, ayudarás de forma directa a sensibilizar a otras organizaciones y comunidades.
Tus empleados se encuentran entre estas personas, no sólo se van a convertir en motor del cambio sino que además van a ser embajadores de tu marca y promotores de un mensaje responsable.
Sin embargo, como otras políticas empresariales, el Observatorio nos señala la necesidad de una metodología, para que estas acciones se desarrollen adecuadamente y no queden como meros hechos de caridad.
Por ello es necesario que se realice un análisis, diseño, implantación, evaluación y control, poniendo atención a algunos puntos sensibles como que la acción no sea vista por la empresa como un acto corporativo más, que los resultados sean siempre superiores en valor que el esfuerzo que las ONG colaboradoras ponen a disposición de la empresa, y muy especialmente, la coordinación del voluntariado conlleva la sensibilización previa de los empleados, concienciándolos de la necesidad de su contribución, de la relevancia de sus acciones y del compromiso a largo plazo por parte de todos que el voluntariado supone.
Voluntariado y Responsabilidad Social Corporativa
Hablar de voluntariado como un programa aislado dentro de la empresa es un error, el voluntariado al igual que la responsabilidad social no deben quedar aislados ni pertenecer a un sólo departamento, deben ser un todo integrado en cada uno de los departamentos, directivos, responsables y personas que forman parte de la empresa.
La responsabilidad de llevar a cabo el voluntariado debe ser así una necesidad de la propia empresa, que responde a las necesidades y preocupaciones de las comunidades, tanto que debe ser la misma organización la que impregne y despierte en los empleados la voluntad de hacer algo más grande y positivo para la sociedad. En un mundo amenazado por los problemas actuales las empresas deben ser responsables de garantizar el bienestar de las personas.